Lost Ollie








"Ollie está perdido" es la nueva miniserie que ha liberado recientemente la plataforma de 'streaming' Netflix a la que, por cierto, no ha hecho casi promoción. Inspirada en la novela homónima de William Joyce, Ollie es un muñeco, con forma de conejo, que acompaña a su amigo Billy durante una de las etapas más duras de su vida y que ningún niño debería de afrontar. 


Esta ficción serializada se asemeja a 'Toy Story' en su primer episodio, pero al finalizar el segundo el espectador comprende que no es así y que la profundidad de la serie se desarrolla más allá de lo que pueda suponer la madurez del individuo. Ollie es el ejemplo por antonomasia del apoyo que todos necesitamos para afrontar un trauma determinado. En tal sentido, la representación de la madre, HACEDORA del peluche, es la figura de apego del niño. Es ella la que confecciona a un ser al que le da vida con innumerables recuerdos porque sabe que tarde o temprano dejará de estar con su pequeño. 


No puedo decir nada más porque no quiero destripar la trama, pero es de estos productos lacrimógenos que son tan reales que es imposible que una no se estremezca porque puede ser ficción, pero el caso que se explica es tan real que eriza la piel. En serio, si no te emociona, estás muerto por dentro.


Sin pretensiones de ponerme filosófica, es necesario que traiga a colación el "memento mori" latino que traducido al castellano significa "recuerda que vas a morir". Aprovechad vuestro tiempo con los seres queridos porque nuestro paso por el mundo es efímero. 


¿Teníais un muñeco favorito en la infancia?


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