"Toxicity" de System of a Down

 

E. de Escarlata.

Nombre: Toxicity.

Banda: System of a Down.

Género: Metal.

Año: 2001-2002.

Resulta simple categorizar a System of a Down como un grupo de metal porque toca demasiados subgéneros del mismo; desde metal alternativo o hard metal al nü metal. Es, por tanto, un grupo poliédrico tanto en estilo, como en temática.

System of a Down nació en Los Ángeles en 1994 a manos de  Serj Tankian (voz, teclado y ocasionalmente guitarra), Daron Malakian (guitarra y voz), Shavo Odadjian (bajo) y John Dolmayan (batería).De estos, los dos primeros son también los compositores. Como se puede apreciar en sus apellidos, aunque sean estadounidenses, sus integrantes son de ascendencia armenia por este motivo no es de extrañar que en sus melodías incorporen instrumentos como el buzuki que, aun siendo incierta su procedencia, se estima que puede proceder de Grecia. Además, también introduce instrumentos de cuerda poco conocidos como el dulcémele, que caracteriza al estilo folclórico del hillbilly. 

Buzuki

Dulcémele

Dicho esto, ahora toca hablar de su mejor disco, así como también de uno de los mejores de la Historia: Toxicity porque no solo se desenvuelve en el mundo del metal cuyos ritmos melódicos, aunque no lo parezca, son una herencia proveniente de la música clásica. También campa a sus anchas por otros géneros como el folk, el rock progresivo, el jazz, la música del medio oriente, y la música griega. Así que, antes de descartar este disco, que vio la luz en 2001, merece la pena concederle los cuarenta minutos de duración que tiene porque, además, a modo de cierre, hay unos minutos de melodía oriental que te dan toda la paz que necesitas. 

Para que una obra discográfica sea bella, hay que tener en cuenta la temática de sus canciones, no solo su melodía y, en este sentido, no se puede olvidar el amplio abanico de temas sociales que toca este grupo y por eso es normal que sea la segunda banda que, junto con The Beatles, alcanzase el segundo puesto de discos más vendidos en Estados Unidos dado que en sus letras predominan tópicos serios a los que no se les suele dar gran profundidad. Denuncian el maltrato infantil, la violencia en todas sus magnitudes, los conflictos bélicos, los genocidios (de esto se hablará más adelante), la pornografía, el machismo, el consumismo exacerbado dando lugar a una desigualdad social, también la intolerancia y la discriminación. 

Alguno de los temas que causaron controversia fueron, en primer lugar, "Chop Suey!" cuya traducción es "mezclas". En un primer momento se iba a llamar "Suicide!", pero la banda decidió cambiar el título y, aún así, la canción fue censurada en algunos países. Se dice que en esta canción el vocalista principal, Serj, quiso denunciar la pederastia porque fue victima de ello, sin embargo, hay una referencia que lo asocia con un pasaje evangélico cuando en una estrofa se reproducen las supuestas palabras que dijo Jesucristo durante la crucifixión, "Father into your hands, I commend my spirit. Why have you forsaken me?. 

En segundo lugar "Needles" o "agujas" que hacen referencia a las agujas que usan los drogadictos para inyectarse heroína.  En tercer lugar, está el acrónimo ATWA que alude al eslogan Air, Trees, Water, Animals and All The Way Alive. ¿A qué parece maravilloso? Pues sí, pero este es uno de los mandatos ecológicos que defendió el líder sectario, Charles Manson porque sí, queridos lectores, Daron consideraba a Manson uno de los referentes en la lucha ecológica. Ahora pregunto yo, ¿hasta que punto una obra se debe disociar de su autor?

En "Prison Song" tenemos una crítica al sistema de prisiones estadounidenses y, la verdad, es una obra maestra. 

Hay muchas otras que destacar, pero mis preferidas son "Deer Dance" y "Forest". En la primera nos encontramos con estas estrofas a modo de introducción:

Circumventing circuses,

Lamenting in protest,

To visible police,

Presence sponsored fear,

Battalions of riot police,

With rubber bullet kisses,

Baton courtesy,

Service with a smile

[...]

En ella se habla de los conflictos policiales, de la represión y de la violencia. Quizás lo que más me llama la atención es, como no, su melodía porque abundan los sonidos orientales, la polarización entre el paroxismo del ritmo que desencadena una catarsis final hasta que desciende abruptamente para tocar la calma. 

La segunda, "Forest" versa sobre la pedofilia y como se asocia con la jerarquía eclesiástica. Su estructura melódica es muy similar a la de "Chop Suey!",pero hay un contraste vocal impresionante. 

[...]

(Coro)

Why can't you see that you are my child?

Why don't you know that you are my mind?

Tell everyone in the world that I'm you

Take this promise to the end of you

[...]

Opinión personal

Al margen de la subjetividad que puede acarrear una "opinión personal", tengo que decir que el vocalista principal, Serj Tankian, es una auténtica bestia sobre el escenario. No solo te absorbe con esa voz tan meliflua que pone, muy de vez en cuando, sino que puede cambiar de registro antes de un chasquido de dedos y adoptar unos tonos de "berreo", en términos finolis, guturales, sin precedente. Es, sinceramente, uno de los pocos discos que, al menos a mí, me he tragado enteritos sin necesidad de ir cambiando de pista a pista y tiro porque me toca hasta que encuentre una canción que me agrada.

Javier Mardones (2017), afirmó que con este álbum la banda, no solo se había consagrado, sino que había ampliado el nü metal. Estoy totalmente de acuerdo. A inicios de los años dos mil, el nü no gozaba de mucha repercusión aun teniendo precedentes como "Blind", de Korn, de 1994 que claramente sirvió de precedente para muchos, pero con Toxicity, este subgénero se afianzó. 

EXTRA. 

Antes comenté que System había tratado temas de genocidio porque, como dije, eran descendientes de armenios que exiliaron a EEUU. Los abuelos de Serj sobrevivieron al genocidio armenio (1915 - 1923​) que fue llevado a cabo por el Imperio otomano y que acabó con más de dos millones de victimas, pero en el documental solo apareció su abuelo.Así, el músico formó parte del documental independiente, Screamers de 2006, dirigido por  Carla Garapedian que trata sobre los gobiernos que recurren al genocidio como arma que combate su incompetencia.  El documental está colgado en Youtube por si a alguien le interesa.